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Hoy en día hablar de Internet sin mencionar, utilizar o referenciar a algún producto de Google es misión casi imposible. Yo mismo estoy utilizando en este momento Gmail, Google Reader, Google Desktop, Google Imágenes y Google Calendar… aunque podrían ser más.

En casi todas estas herramientas de Google se nos muestra publicidad relevante y relacionada con lo que estamos haciendo en ese momento. Así, si recibo en Gmail una nota de prensa de Xbox 360, por ejemplo, la publicidad me mostrará anuncios sobre dónde comprar la consola en Sevilla y tiendas online de juegos de la consola. Y lo mismo si recibo un correo de algún amigo o lo que sea.

Con el afán de personalizar al máximo la publicidad de cara al usuario, y aquí viene lo que nos afecta a nosotros los jugones, Google ha registrado una patente que consiste en un sistema que utiliza la información de las interacciones videojuego-usuario para formarse un perfil psicológico del usuario y, con él, mostrar diferentes anuncios dentro del propio videojuego (cosa que Google ya es capaz de hacer tras la adquisición de AdScape).

Aquí tenéis unas frases sacadas directamente de la patente número 20070072676. Vayan preparándose para no tener intimidad:

• “El diálogo del usuario (por ejemplo, en los juegos de rol o de simulación) puede ser utilizado para caracterizar al usuario (por ejemplo, si es analfabeto, soez, directo, educado, callado, hablador, etc.). Además, el propio juego del usuario puede servir también para caracterizarle (por ejemplo, cauteloso, stratégico, arriesgado, agresivo, polémico, sigiloso, honesto, deshonesto, cooperativo, etc.)”

• “Por ejemplo, si un usuario pasa mucho tiempo explorando entonces quizá esté intereado en viajes, por lo que el sistema le ofrecería anuncios de viajes. Si el usuario pasa mucho tiempo chateando en lugar de luchando sugiere que quizá esté interesado en teléfonos móviles o llamadas internacionales”.

• “Las tarjeta de memoria de los videojuegos también almacenan información que puede ser interesante para los anunciantes. Si en ellas, por ejemplo, se almacenan datos de carreras de coches en las cuales se utilizan automóviles BMW y alemanes, quizá significa que el usuario es una aficionado a este tipo de coches, por lo que quizá encuentre interesantes los anuncios sobre ellos”.

• “Si el usuario ha estado dos horas jugando sin parar, el sistema le mostraría anuncios de Pizza Hut, Coca-Cola, café o cosas relacionadas”.

Este paso del análisis de la actividad de los usuarios basado simplemente en el contenido de la información a otro en el que se analizan las propias interacciones y se crean perfiles psicológicos es el que comienza a preocupar a diversas organizaciones que defienden los derechos y libertades digitales de los consumidores, como ‘Open Rights Group’.

Fuente: VidaExtra